Foto: Shutterstock
Piel Perfecta: El maquillaje diario que penetra en cada línea y arruga de tu rostro es la manera más rápida para envejecer. La piel tiende a resecarse mientras vamos envejeciendo. Para prevenir esto nunca olvides hidratar tu rostro y aplicar primer. El tono de nuestra piel también cambia así que asegúrate que el tono de tu maquillaje sea el mismo de tu piel. Finalmente no uses polvo, ya que marcara las líneas de tu rostro de más. Si tienes un cutis grasoso sólo aplica polvo en la zona T.
Mejillas rosadas: Procura evitar el blush en polvo, es mejor usar uno en crema. Los tonos cálidos también ayudan a verte más joven, usa tonalidades rosa o rosa dorado, esta última le queda a la mayoría de los tonos de piel. Puedes usar un iluminador y mezclarlo con tu blush.
Ojos con mirada joven: Las ojeras con la edad pueden empeorar. Escoge un corrector que no sea muy pesado o seco y difuminalo con una brocha. Usar primer de ojos es esencial para disminuir las arrugas. Si normalmente te gusta usar un maquillaje más dramático trata de suavizarlo al momento de difuminar, ya que estos tonos también acentúan la edad. Busca tonos neutrales. Si mantienes tus ojos abiertos al aplicar la sombra puedes ir un poco más arriba del parpado móvil lo que hará que tus ojos se vean más grandes. Utiliza gel para el delineado y marca la colita. Termina rizando tus pestañas y aplica un máscara de pestañas que te de volumen.
Cejas perfectas: Las cejas tienden a hacerse más delgadas con los años. No olvides marcarlas para que tus ojos se vean más frescos. Usa un lápiz que sea ligeramente más claro que el tono de tus cejas. Y termina con un gel para cejas. No olvides usar un iluminador bajo los arcos para iluminar tu rostro de manera inmediata.
Labios más llenos: Para lograr que tus labios se vean más grandes empieza con una suave exfoliación (un poco de azúcar morena funcionara) después usar un primer para evitar que los labios sangren. Delinea tus labios con un lápiz de color neutral. Evita los lipsticks obscuros, escoge tonos cálidos, neutrales o rosados. Añade un toque de gloss en el centro de los labios, te dará un aire más suave y jovial.