Se trata del un hombre llamado llamado Lee Weir, originario de Nueva Zelanda, quien es fanático de la serie televisa «Simpson» lo cual lo llevo a tatuarse a Homero y algunos momentos épicos de la serie en el brazo izquierdo.
Tal fanatismo lo llevo a ser reconocido mundialmente y ganar el premio Guinness, la razón principal por la cual se tatuó fue porque su padre nunca lo dejo ver la serie, ya que, la consideraba inapropiada para su hijo, gracias a su Padre, Lee quiso llevar de por vida a Homero en sus múltiples facetas, Homer Hulk, bebe, comiendo rosquillas, en el parque de diversiones y más.
Son 41 tatuajes en total